Hemos querido tomar para nuestra asociación el nombre de la figura del monarca Alfonso I, hijo de Don Pedro, Duque de Cantabria, debido a que en estos tiempos, por desgracia, incluso en su propia tierra de origen muy poca gente sabe de su existencia.
Nacido en Cosgaya en el año 693, en él coinciden varios aspectos fundamentales que conforman nuestra identidad. Por un lado, es el monarca que, tras la primera resistencia victoriosa opuesta por el elemento visigodo a la penetración musulmana en la península, personificada en Don Pelayo, une los territorios resistentes y comienza la Reconquista con firmeza y eficacia frente al moro invasor, ampliando los originarios territorios astures y cántabros hasta la Ribera del Duero y Galicia. Por otro, como rey cristiano, propició también la Reconquista espiritual del solar ibérico.
En nuestro actual mundo, huérfano de líderes dignos de tal nombre, las grandes figuras de nuestra historia cobran una especial relevancia. La austeridad, el honor, el deber, la fe y la disciplina han ser recuperados y el recuerdo de aquellos caudillos que, como Pelayo o Alfonso I, conformaron el germen de lo que sería la futura nación española, debe estar siempre presente.
¡NO PEDIREMOS PERDÓN POR NUESTRA HISTORIA!