lunes, 24 de junio de 2013

Unos apuntes para entender que está pasando en Siria

Siria, un país clave en el Creciente Fértil

Para darnos cuenta de la importancia que tiene Siria en el tablero geopolítico internacional basta con echar un vistazo a un mapa. Situada en la orilla oriental del Mediterráneo, este país de apenas veinte millones de habitantes está en el corazón de la zona más caliente del planeta desde hace décadas. También en una de las zonas con más historia de la humanidad, un área denominada Creciente Fértil donde tuvo lugar el nacimiento del neolítico con la aparición de la agricultura y que fue cuna de grandes civilizaciones antiguas.

Siria cuenta con producción propia de petróleo, importantes reservas de gas y quizás lo más importante, es la ruta natural de gaseoductos y oleoductos que transportan materias primas desde Irán e Irak hacia el Mediterráneo. Y si a todo esto le unimos 76 km de frontera con Israel y 822 con Turquía, principales valedores de los intereses norteamericanos en la zona, veremos porqué todo el mundo se pone nervioso con lo que está pasando aquí.

En Siria viven varios grupos étnicos y religiosos. Pese a que la religión mayoritaria es el Islam, en su vertiente sunita, hay importantes minorías como chiitas, alauitas o cristianos. Para hacer más complicado todo hay que añadir la existencia de una zona kurda en el norte del país y la presencia de abundantes refugiados palestinos.
 

El Bass, el gran partido socialista y panarabista

Muchas veces cuando hablamos de partidos políticos fuera de Europa imaginamos a estos con un funcionamiento parecido a lo que conocemos por estos lares, algo así como estructuras cerradas y burocratizadas que funcionan a nivel de estadosnación, y así, se nos escapan muchas características de los sistemas de partidos en otras partes del globo como las grandes plataformas electorales estadounidenses o los partidos supranacionales en los países árabes.

El Baas (Partido del Renacimiento Árabe Socialista) es el partido hegemónico en Siria desde 1963. Fundado en los años 40 como un movimiento nacionalista panárabe, laico y socialista (no marxista) ha tenido y tiene ramas en prácticamente todos los países árabes, pero es en Siria e Irak donde ha copado el poder durante décadas.

Es importante hacer notar cómo la ideología panárabe del Baas ha constituido un freno importante al desbordamiento del islamismo radical. La idea de comunidad nacional forjada en torno a hechos étnicos como la lengua y la raza árabe, se enfrenta aquí al panislamismo centrado en el hecho religioso común. Este último mucho más en boga en la última década pretende la unión de una zona mucho mayor, ya que no solo pretende unir a los países árabes sino a todos los de religión musulmana, incluyendo aquí a países que van desde el África negra hasta Indonesia.

No es casualidad pues que el nacionalismo árabe haya calado bastante entre los árabes cristianos que, excluidos de la Unma (Comunidad de creyentes), encuentra aquí un hecho identitario que les da sentido como pueblo. De hecho uno de los fundadores del Baas y su principal ideólogo, Michel Aflaq, procede de una familia de religión cristianoortodoxa (rama griega).

El Frente Nacional Progresista

En el sistema político sirio es obligatorio hablar también del Frente Nacional Progresista. Se trata de una coalición de partidos de la que forma parte el Baas y que agrupa a diferentes organizaciones políticas sirias, desde comunistas y socialdemócratas hasta otras de tipo nacionalista como el SSNP. Se constituyó en 1972 para dar voz a agrupaciones distintas al Baas pero con la condición de que fuesen también laicas y aceptasen su hegemonía.

Tenemos que hacer una mención especial al Partido Árabe SocialNacionalista. Esta organización pese a compartir muchas similitudes con el Baas, como el laicismo o el socialismo, se diferencia de éste en que es nacionalista sirio, no de la Siria que conocemos actualmente sino de una Gran Siria que abarcaría a otros países como Irak, Jordania, Palestina o Líbano. El SSNP (en sus siglas en inglés) es el segundo partido político de Siria después del Baas y cuenta con 100.000 militantes, ha formado parte del Frente Nacional Progresista hasta 2012, cuando se presentó en la coalición Frente Popular para el Cambio y la Liberación, que pese a estar enfrentado electoralmente al FNP se alinea frecuentemente con el Baas. Fundado en 1932 por el libanés Antun Saadeh, de familia cristiano ortodoxa griega, presentaba muchas similitudes ideológicas con las organizaciones fascistas de la época, de hecho su emblema recuerda bastante a la esvástica nacionalsocialista.

AlAssad

La familia AlAssad lleva a la cabeza del estado sirio desde que Hafez AlAssad se hiciese con el poder en 1971. Tras la muerte de éste, su hijo Bashar AAssad pasó a presidir el país y las fuerzas armadas sirias.

Una de las razones que se han dado para explicar el presente conflicto en Siria es el hecho de que la familia Assad pertenece a la minoria alauita, una rama del Islam emparentada con los chiitas. Pese a que la mayoría de la población siria es Suní, los alauitas ocupan una gran parte de los cargos políticos y militares del estado. Y es también por esto que Irán o Hezbolá apoyan al estado sirio frente a los rebeldes.

El conflicto

La guerra civil en Siria se inicia en 2011 cuando después de una serie de protestas contra el gobierno, estas pierden su cariz pacífico y opositores al régimen y sectores del ejército forman el Ejército Libre de Siria, iniciándose una guerra de guerrillas en el norte del país que se va extendiendo rápidamente por todo el territorio.


 
 
(En rojo las zonas controladas por el Ejercito Sirio, en verde las zonas controladas por los rebeldes)

 
La ocasión ha sido aprovechada por los enemigos tradicionales de Assad para intentar librarse de un régimen que les era hostil. Así han confluido en su apoyo a los rebeldes desde EE.UU. o Israel, a las monarquías del Golfo Pérsico o los terroristas islámicos de AlQaeda. Del lado del régimen encontramos a países como Rusia o Irán y la milicia chiita libanesa Hezbolá.
 
En Europa Occidental los poderes oficiales se han puesto rápidamente del lado de los rebeldes ofreciéndoles armamento, pese a que en este momento estos estén prácticamente dominados por su facción más radical. De hecho se han podido constatar ya muchas atrocidades cometidas por los rebeldes contra cristianos y civiles no lo suficientemente ortodoxos con su versión totalitaria de la Fe mahometana. Hay que decir que en Europa también encontramos apoyos al estado sirio, organizaciones nacionalistas e identitarias ya han dejado claro que los intereses reales de Europa se alinean mucho más con el estado sirio, único freno en la zona al islamismo radical, que con los rebeldes. También algunas organizaciones de izquierda han mostrado su apoyo al régimen de Bashar AlAssad.

A.J.

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