Hubo un tiempo en que Teka fue un referente empresarial de la región. Decir que Teka fue una empresa modélica quizás sería exagerar, pero sí que podemos afirmar que todos sentíamos aprecio y reconocimiento por una empresa que además de crear riqueza y ofrecer el siempre inestimable trabajo, también tenía cierto compromiso con la comunidad, mas allá de las cifras de negocio.
Hoy Teka abre más la hemorragia industrial de Cantabria dejando a 188 trabajadores en la calle e inicia su desmantelamiento trasladando toda su producción de cocinas a Turquía. Nuestra región paso a paso se convierte en un desierto industrial de solares vacíos, fábricas abandonadas, paro y depresión.
Queremos expresar nuestro rechazo frontal al ERE anunciado por Teka y al injustificable traslado de la producción de cocinas a Turquía basado en unas cuentas falsas y claramente manipuladas. Así mismo nos solidarizamos totalmente con los trabajadores de la planta y apoyaremos todas las manifestaciones que hagan los trabajadores.
A nuestro juicio, es imprescindible entender que las causas profundas del traslado de Teka y la desindustrialización de Cantabria y España se encuentran en la forma actual de la globalización que se basa en dos dinámicas: la deslocalización de empresas a países menos desarrollados para abaratar la producción y obtener más beneficios y la importación masiva de mano de obra barata inmigrante. Hasta que no paremos esta dinámica no cesará la desertización industrial de la región. Es necesario adoptar medidas profundas como el establecimiento de aranceles a la importación de productos de países ajenos a la UE. Hay que tener claro que ni el PP, ni el PSOE ni IU, UPyD o cualquier partido convencional van a tomar esta decisión, es necesario construir una alternativa política capaz de tomar estas decisiones.
Hasta entonces estaremos siempre con nuestros trabajadores
¡Solidaridad con los afectados de Teka!
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